Esta cocina la encontramos en el bonito pueblo de Palau Saverdera, en el balcón del Empordà. Una cocina que pese a las pequeñas dimensiones, aprovecha cada uno de los espacios mediante una distribución en forma de U, que genera una zona de columnas con un espacio decorativo abierto para el desayuno, y termina con una península, con una acertada combinación de colores que proporciona una estancia cálida y agradable.